En el Salón de la Fama del Deporte hay un crespón enlutado
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| ¿Se acabó la leyenda? |
A los 94 años de edad falleció en Caracas, Herman “Chiquitín”
Ettedgui, miembro del Salón de la Fama del deporte venezolano. Atleta, futbolista, golfista, comisario del
hipódromo La Rinconada, periodista deportivo, entre muchas otras cosas que
lo convirtieron en un verdadero profesional del deporte y del periodismo, “Chiquitín” Ettedgui es parte de la historia deportiva del país.
Como parte de esa historia, fue ejemplo para
generaciones de atletas y periodistas. En las canchas deportivas sobresalió en varias disciplinas, especialmente durante
las décadas de 1940 y 1950, cuando impuso récord en la prueba atlética de cien
metros planos. Fue líder goleador al
anotar 12 tantos en la temporada de primera división de 1940 con el Club Unión; y sobresalió como pelotero de
primera división, en 1945 con el Club
Vargas. Su éxito en el deporte y el periodismo se afincó siempre en la constancia
y dedicación, decía el mismo Chiquitín. Era su fórmula
infalible.
Su constancia en el deporte la refrenda
el hecho de que se mantuvo practicando el golf hasta los 91-92 años y estuvo
escribiendo disciplinadamente por más de 70 años. Fue ciudadano carabobeño, nacido
en Puerto Cabello el 31 de julio de 1917.
Desde los 5 años de edad, andando 1922, se radicó en Caracas y a muy
temprana edad se vinculó al deporte infantil en el Colegio La Salle, de Tienda
Honda, donde sobresalió en atletismo, beisbol y fútbol en categorías infantil y
juvenil.
En julio de 1937, a los 20 años de
edad, Chiquitín se casó con Hilda Margarita Hidalgo,
su compañera de viaje por la vida durante 75 años. De esa unión nacieron cinco
hijos: Herman, Morella, Norman, Alberto y Myriam, quienes le hicieron abuelo
de 16 nietos y más de dos decenas de bisnietos. Siempre marcando la pauta,
Deporte y Periodismo
Las dos grandes pasiones de Herman Chiquitín Ettedgui fueron el deporte y el
periodismo. La crónica deportiva tuvo en él un fiel exponente, conocedor a
fondo del oficio. Su trayectoria en el periodismo deportivo comenzó desde muy
joven: publicó su primera crónica deportiva a la edad temprana de 19 años de
edad, en el diario caraqueño La Opinión Nacional, el 11 de marzo
de 1936 y en octubre de 1937 ya integraba el plantel de reporteros de la
sección deportiva de El Universal.
En las salas de redacción se le
conoció, primero, por las siglas HAEL
y después como “Baby Chiqui”,
seudónimo que usaba para firmar sus crónicas de las diferentes disciplinas, en
las cuales, además, era protagonista como atleta. Compromiso serio. No es fácil
escribir sobre uno mismo. En periodismo no es común escribir en primera
persona. No se debe hacer, el periodista que reportea y redacta no es la
noticia.
La estructura de la noticia es quién hizo qué, cómo, cuándo, dónde, por qué. Pero Chiquitín hizo esas crónicas sobre él mismo. Siempre hay una
excepción de la regla.
El atleta
En 1938 Herman Chiquitín
Ettedgui asistió
a los IV Juegos Centroamericanos y del Caribe con la delegación venezolana que
por primera vez en la historia deportiva del país y con el aval del Comité Olímpico local, representó a
Venezuela en una competencia internacional. Lo hizo como miembro del equipo de
atletismo y marcó un récord al ocupar el tercer lugar en la prueba de 100
metros planos con tiempo de 10,5 segundos, que se mantuvo como marca nacional
por 18 años.
Su mayor pasión deportiva fue el
beisbol. Participó activamente en la escogencia de los integrantes de la
selección nacional de mayores que en 1941 conquistó el título en la Serie
Mundial de Beisbol celebrada en La Habana. Los propios campeones. ¡Buena pupila!
del seleccionador. También se confesaba como gran amante de la actividad
hípica.
Chiquitín será recordado por su gran contribución a la crónica deportiva
venezolana en los diferentes medios y por ser principal vocero de la campaña “Gracias por no Fumar”. En 1943, junto
con el reportero gráfico Juan Avilán
y el impresor Juan “Cabezón” de
Guruceaga
creó la revista Mundo
Deportivo, primera en su tipo en Venezuela.
Fue pionero de espacios deportivos en la televisión. En 1952 trabajó junto a Miguel Thodée,
en Televisa, en el programa Desfile
de los Ases, mientras que en los años sesenta y setenta prestó
servicios en la Televisora Nacional (Canal 5) y Cadena Venezolana de Televisión
(CVTV, Canal 8).
Muchas gracias al periodista Asdrúbal Barrios por los datos aportados
Investigación y texto
Elba Romero López
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