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miércoles, 26 de septiembre de 2012

Devoción cristiana: El Rosario invencible en todas las guerras







Dos Testimonios del Poder del Rosario:
   Rosario: Mas poderoso que la bomba atómica
   * El Rosario y la liberación de Austria



















La Virgen María y Santo Domingo 



 Milagro del Rosario durante la II Segunda Guerra Mundial: del 6 de agosto de 1945

A tantos años de haber ocurrido la tragedia, todavía ni los científicos logran explicación a dos casos sorprendentes ocurridos durante los bombardeos a Hiroshima y Nagasaki, durante la Segunda Guerra Mundial. Los testigos presenciales dijeron que fue un milagro divino vinculado a la invocación de la Santísima Virgen María a través rezo del Santo Rosario.
Sacerdotes y científicos analizaron durante varios años ambos casos y no hallaron explicaciones. Un tercer caso que evidencia el poder del rezo del Santísimo Rosario ocurrió en Austria, donde la intervención divina
Durante la II conflagración mundial dos ciudades japonesas fueron destruidas por bombas atómicas: Hiroshima y Nagasaki. En Nagasaki, como resultado de la explosión, todas las casas en un radio de aproximadamente 2.5 Km del epicentro fueron destruidas. Quienes estaban dentro quedaron enterrados en las ruinas. Los que estaban fuera fueron quemados.
En ambas casos sobrevivieron, una comunidad de padres jesuitas y un convento de padres franciscanos, quienes atribuyeron el milagro al rezo diario del Santísimo Rosario. Al momento de la explosión de las bombas atómicas, unos y otros estaban rezando:

1.- En Hiroshima
         En la historia ambos casos son todavía causa de asombro, por la forma milagrosa cómo estando tan cerca de la explosión, los sacerdotes sobrevivieron a tan terrible explosión.  Sus residencias igualmente quedaron intactas.
Una pequeña comunidad de Padres Jesuitas vivía junto a la iglesia parroquial, a solamente ocho cuadras (aprox. 1Km) del epicentro del epicentro de la bomba. Eran misioneros alemanes sirviendo al pueblo japonés. Como los alemanes eran aliados de los japoneses, les habían permitido quedarse.
         La iglesia junto a la casa de los jesuitas quedó destruida, pero su residencia quedó en pié y los miembros de la pequeña comunidad jesuita sobrevivieron. No tuvieron efectos posteriores por la radiación, ni pérdida del oido, ni ningúna otra enfermedad o efecto. El Padre Hubert Schiffer fue uno de los jesuitas en Hiroshima. Tenía 30 años cuando explotó la bomba atómica en esa ciudad y vivió otros 33 años más de buena salud. El narró sus experiencias en Hiroshima durante el Congreso Eucarístico que se llevó a cabo en Filadelfia (EU) en 1976. En ese entonces, los ocho miembros de la comunidad Jesuita estaban todavía vivos.
         El Padre Schiffer fue examinado e interrogado por más de 200 científicos que fueron incapaces de explicar cómo él y sus compañeros habían sobrevivido. El lo atribuyó a la protección de la Virgen María y dijo: "Yo estaba en medio de la explosión atómica... y estoy aquí todavía, vivo y a salvo. No fui derribado por su destrucción."
         Además, el Padre Shiffer mantuvo que durante varios años, cientos de expertos e investigadores estudiaron las razones científicas del porqué la casa, tan cerca de la explosión atómica, no fue afectada. Él explicó que en esa casa hubo una sola cosa diferente: "Rezábamos el rosario diariamente en esa casa".
         En la otra ciudad devastada por la bomba atómica, Nagasaki, San Maximiliano Kolbe había establecido un convento franciscano que también quedó intacto, los hermanos protegidos gracias a la protección de la Virgen. Allí ellos también rezaban diariamente el santo rosario.


FR. SCHIFFER OF HIROSHIMA
by Fr. Paul Ruge, O.F.M.I.

At 2:45 a.m. on August 6, 1945, a B-29 bomber took off from the island of Tinian to drop the first atomic bomb on Japan. At 8:15 a.m. the bomb exploded eight city blocks from the Jesuit Church of Our Lady's Assumption in Hiroshima. Half a million people were annihilated. However, the church and four Jesuit fathers stationed there survived: Fathers Hugo Lassalle, Kleinsorge, Cieslik and Schiffer. (RH note - all other accounts state clearly that there were eight Jesuits stationed in this home not four - and it is well known that all eight survived - the author of this present article apparently only had the names of four of them, for instance Fr. Arrupe is left out of the list - and at this writing, I have not been able to find the names of the other three Jesuits. end of note.) According to the experts they "ought to be dead," being within a one-mile radius of the explosion. Nine days later on August 15, Feast of Our Lady's Assumption, U.S. forces were ordered to cease fire.




Santo Domingo



El Rosario y la liberación de Austria
13 de Mayo de 1955

En Austria, una cruzada de reparación del Santo Rosario implorando la intercesión de la Virgen de Fátima, permitió que este país quedara libre de la dominación soviética. Desde el punto de vista secular es incomprensible la liberación de Austria de las garras del poder soviético el 13 de Mayo de 1955. Las tropas Soviéticas se retiraron sin explicación.
         Austria fue anexada por Alemania en 1938 por lo que en la II Guerra Mundial fue parte del Eje Nazi. Terminada la guerra Austria, como Alemania, fue dividida en cuatro zonas de ocupación para ser administradas por Estados Unidos, Inglaterra, Francia y la Unión Soviética. A este último se le dio la parte sur que es la más rica y que rodea a Viena, la capital, la cual también fue dividida en cuatro zonas.
         En menos de dos años Alemania obtuvo gradualmente su independencia política, menos la zona Soviética.  Surgió así la Republica Alemana. Los soviéticos favorecieron el reclamo de territorio austriaco por parte del dictador comunista Tito, de Yugoslavia. Apoyaron un esfuerzo comunista de tomar control de toda Austria. Mantuvieron férreo control de toda Europa Oriental, convirtiendo a todos los países que habían ocupado en satélites de Moscú. Esta situación continuó hasta la llegada de Gorbachev.
         El Padre Capuchino Petrus Pavlicek, apoyado por las oraciones de religiosas, hizo una peregrinación a Mariazell, el principal santuario mariano de Austria, para pedir consejo a la Virgen en medio de la oscuridad que abarcaba a su patria. El 2 de Febrero de 1946, fiesta de las luces, Candelaria (Virgen de la luz), oraba ardientemente ante la imagen milagrosa cuando recibió una voz interior que le pidió: "Haz lo que te digo y tendrán paz".
         El Padrel Pavlicek se avocó a cumplir lo que la Virgen había pedido en Fátima y fundó la Cruzada de Reparación del Santo Rosario en 1947. Todos los austriacos se unieron para honrar a la Virgen con un rosario perpetuo, implorando por la conversión de los pecadores, paz mundial y libertad para Austria. No había dinero para comprar una imagen de la Virgen de Fátima, por lo cual el obispo de Leira, Portugal, envió a Austria una estatua de la Virgen de Fátima, obra del mismo artesano que hizo la Virgen Peregrina original. Hubo  peregrinaciones a innumerables ciudades de Austria, encabezadas por el Padre Pavlicek.
         En Septiembre de 1948, el Padre Pavlicek comenzó la Cruzada de Reparación del Santo Rosario en una iglesia de Viena. La Cruzada incluía confesión, bendición de los enfermos, el Santo Rosario y se coronaba con la Santa Misa. El padre llamaba estas devociones "asaltos de oración" y podía tomar hasta cinco días. "La paz es un regalo de Dios y no de los políticos", le decía a sus compatriotas, y los regalos de Dios se obtienen con la oración que asalta al cielo como los soldados asaltan un fuerte- con confianza y determinación.

A la buena de Dios
         Las procesiones de la Cruzada con la estatua de la Virgen de Fátima el 13 de cada mes creció tanto que el Padre Pavlicek decidió hacer una procesión anual invitando a todas las parroquias de Viena. Escogió el 12 de Septiembre, la fiesta de Nombre de María. La situación de los cristianos parecía imposible pero vencieron por la intercesión de la Virgen y el rezo del Santo Rosario. Ahora le pedían a la Virgen que los liberara del Comunismo.
         El Primer Ministro de Austria, Leopold Figl, dijo al Padre Pavlicek: "Aunque fuésemos solo nosotros dos, yo iría. ¡Mi país lo exige!" En efecto se hizo presente, rosario y vela en mano, en cada ocasión solemne, acompañado de sus ministros. El sucesor del Primer Ministro, Julius Raab, también asistía a las grandes procesiones.
         La Cruzada continuó expandiéndose por toda Austria, desbordándose en territorio alemán y suizo. Para el año 1955, mas de medio millón de austriacos (aprox. 10% de la población de aquel tiempo) se habían comprometido a rezarle diariamente a la Virgen de Fátima, pidiéndole por la conversión de los pecadores, paz en el mundo y libertad para Austria. Un número aun mayor participaba en las procesiones marianas y en los "asaltos de oración".
         En ocho años se produjeron 260 reuniones sin hallar una resolución sobre el destino de Austria. Mientras tanto se intensificaba la represión comunista contra la Iglesia. Era una verdadera prueba para aquellos que tanto habían rezado.
Y ocurrió el milagro: el 24 de marzo de 1955 los soviéticos invitaron a los austriacos a una conferencia. Pensando que el futuro de Austria se sellaría en Moscú, el Primer Ministro Raab, ante de partir, le pidió al Padre Pavlicek, "Por favor, reza y pídele a tu gente te ore mas fuerte que nunca"
         Ante la gran sorpresa de todo el mundo, los soviéticos anunciaron en abril que sacarían sus tropas de Austria en el plazo de tres meses. El 15 de mayo, las fuerzas aliadas que ocupaban Austria firmaron un tratado garantizando su independencia. El 26 de octubre de 1955 partió el último soldado ruso del suelo austriaco.
         ¿Quién como Dios?

Investigación y texto:
Elba Romero López




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